Aprender Tarot está a tu alcance, gracias a este curso de tarot gratis, lo conseguirás.
Origen del Tarot
La naturaleza de los elementos que configuran la baraja del Tarot, son hoy día un misterio. Existen opiniones de que fueron los primeros cristianos los pioneros en utilizar una especie de cartas con distintas representaciones, a modo didáctico para la enseñanza de la nueva doctrina a personas sin apenas conocimientos. Esto ocurriría en las reuniones secretas que en época romana celebraran los nuevos catecúmenos a la doctrina de Jesus.
Sin embargo, es una teoría más sobre el origen de este tipo de mancia. Hay quien vincula la palabra Taro, con algún nombre de ciudad o rio italiano, incluso con algún término de origen arábigo. Para los expertos ocultistas de los siglos XV y XVI, la etimología de la palabra aparece gracias a la unión de dos términos de naturaleza egipcia, cuyo semantema viene a significar “camino real”, o lo que es lo mismo, camino hacia la sabiduría.
El conjunto de cartas, en origen, aquellas que fueron importadas de Egipto a continente europeo, estaban formadas por cuatro palos muy parecidos a los que aún vemos hoy día: copas, espadas, bastones y monedas.
Ya desde una época temprana, sobre el 1228, D. C. se les empieza a atribuir un plano simbólico e interpretativo a cada elemento, destacando por importancia determinadas figuras. Algunos estudiosos del fenómeno sugieren que esta evolución del Tarot, el paso a un plano figurativo e interpretativo tiene vinculación con el desarrollo de la Cábala y la inquisición y que, el simbolismo es también, un medio de supervivencia de distinta sabiduría pagana frente al imparable empuje del dogma cristiano.
Los mazos tal y como los entendemos hoy, datan del S. XV y tienen su origen en Italia. En principio este tipo de cartas, no fueron ideadas para la adivinación, sino para el juego entre nobles y grandes personajes.
En realidad, nadie sabe en qué punto este tipo de cartas empiezan a tener una significación trascendental. Se sabe que, a partir de estas fechas, Siglos XV y XVI, el mazo de cartas se va ampliando con nuevas figuras: imágenes de dioses, héroes, o incluso motivos astronómicos. La primera referencia literaria a este arte adivinatoria aparece en el S XV. El desarrollo masivo de este tipo de cartas viene provocado, por un lado por una enorme popularidad en círculos ocultos a la Inquisición y a la Iglesia y, por el otro, al desarrollo de la imprenta, en torno al 1440. El más popular de estos tipos de mazos, será el llamado Tarot Marsella, el cual aún hoy sigue en plena vigencia.
Poco a poco, las cartas van adquiriendo un valor trascendental, los motivos, los nuevos triunfos añadidos pretenden reflejar una sociedad y un mundo, cada vez más complejas.
Es a partir de los Siglos XVII y XIX, cuando el Tarot transgrede un contexto social popular para sentarse, con gran entusiasmo, en sociedades ocultistas y esotéricas como herramienta de interpretación y adivinación. Incluso Antoine Court de Gébelin, clérigo francés, escribirá un texto a modo de tratado titulado Le Monde Primitif; donde se vincula las imágenes del Tarot de Marsella con misterios como el de Isis y Thoth, para ello Gébelin verá claras conexiones entre los triunfos y figuras del Tarot de Marsella con el de Egipto; el propio Aleister Crowley tomará estos preceptos asentados por Antoine Coourt de Gébelin para crear su famosa baraja de Thoth.
Será en 1875, cuando el ocultista francés J. B. Alliette proceda a desarrollar técnicas profesionales de adivinación mediante el Tarot. Será este ocultista francés quien estandarice el Tarot como herramienta de adivinación y será éste quien desarrolle una serie de teorías que vinculan las cartas con la astrología, los cuatro elementos y los cuatro humores (bilis negra, bilis amarilla, sangre y flema)
Relevancia del Tarot
Quizá por influencia de la Iglesia, muchas personas, aún hoy, vinculan al Tarot con lo oculto y lo oscuro; para muchos es como abrir una puerta o consumar un llamamiento a determinados entes oscuros y perversos. Precisamente, los más reaccionarios con este tipo de mancia son los que menos la conocen y menos la han estudiado. Esta claro que detrás de estas actitudes, por un lado, está el peso de la Iglesia, la cual ha condenado de manera y calificado como “aberraciones” el hecho de recurrir al Tarot.
Por otro lado, ante tal actitud negativa de muchas personas, puede estar también el miedo. El miedo que muchos tienen a conocer su futuro. Nadie queremos oír cuándo vamos a morir, ni las cosas malas que van a ocurrirnos. Es en parte, ello, una labor pedagógica de quien lee las cartas: hacer especial relevancia en aspectos positivos y, sin obviarlos, de una manera sutil, aconsejar en cuanto a las cuestiones negativas que pudieren aparecer.
Por otra parte, en este punto hemos de señalar que los 22 arcanos mayores y los 56 menores que configuran el Tarot, no se les otorga el poder de adivinar el futuro, pero si el de predecir, en otras palabras, el Tarot nos indica la posibilidad de un futuro entre muchos posibles, de hecho se parte del principio que pese a la fidelidad de las cartas, y de quien las interpreta, el futuro son las consecuencias de distintas elecciones, por lo tanto no se concibe como algo cerrado e inexorable; alguien que verdaderamente ame esta técnica del tarot, debe explicarle a quien se somete a sus interpretaciones de estas cuestiones.
Es cierto, por otra parte, que el Tarot abarca un plano físico, como uno superior espiritual, por lo que este método puede quedar habilitado para saber y conocer no solo vidas futuras, sino también distintos estados de vidas pasadas. La trascendencia se realiza al través de las palabras del tarotista, la palabra, por lo tanto es la guía en el plano de las cartas. El tiempo se comprime en unas cartas sobre la mesa y unas interpretaciones más o menos aproximadas. Sobre la mesa deben fijarse, una vez echadas, las cartas que determinan un pasado, un presente y un futuro.
En cuanto a la vinculación de este tipo de adivinación con el mal, quizá ello depende más de las actitudes de quien quiere saber como de quien dice interpretar. Este arte, nada tiene que ver con el satanismo, ni el espiritismo; quizá sí con el paganismo en cuanto a su origen y con el espiritualismo en cuanto a su trascendencia. Repito, las cartas son solo un instrumento, no una invocación, ni un llamamiento a fuerzas oscuras.
Tarotistas
Una buena tarotista tiene que ser honesta. Olvidarse de todo prejuicio. Además requiere que su naturaleza espiritual sea elevada y tenga un buen conocimiento y una buena relación con sus cartas. No es solo el estudio y la interpretación de cada símbolo, es el don que tiene que tener para trascender lo interpretativo y llegar a un plano superior espiritual, de tal manera que, los tarotistas elevados tienen la capacidad, mediante ese don y la relación con sus cartas, de poder comunicarse con Energías divinas y obtener respuestas de ellas.
De otro modo, alguien que tiene el don y el conocimiento suficiente y ha torcido su camino hacia la luz, tiene el mismo poder para comunicarse con aquellos seres oscuros o negativos. Repito una vez más: las cartas son el instrumento, no el fin último. Dependerá siempre de la actitud de quienes tienen el conocimiento y el don para el cómo, el cuándo y el donde del empleo de esta antiquísima técnica de adivinación.
Aprender Tarot es sencillo: Curso de Tarot Gratis Online
Aprender tarot está a tu alcance gracias a nuestra web y al curso de tarot que regalamos. El tarot económico es una herramienta adivinatoria muy utilizada para descubrir el futuro. Se utiliza una una baraja de 78 cartas de diferente simbología.
Cada vez son más las personas que acuden al tarot para saber qué va a ocurrir con su trabajo, con su matrimonio, o con aquel familiar que está muy enfermo. Este arte adivinatoria, técnica para adivinar el futuro se realiza colocando de diferentes formas una baraja de cartas que consta de 78 naipes dividida en dos bloques: 22 Arcanos Mayores y 56 Arcanos Menores (el término “Arcano” proviene del sánscrito, que significa secreto, recóndito). De origen incierto, se cree que el tarot llegó a España en el S.XIV, por lo que se puede comprobar en un escrito propiedad del obispo Lope Berrientos, que lo menciona.
Los Arcanos Mayores representan principios universales, como la vida o la muerte; estados de evolución o situaciones de la existencia humana, e incluso interacción con otras personas. En definitiva, representan temas importantes en la vida de la persona que consulta, así que se trata de la parte más importante de la baraja. A continuación te esbozaré cada una de ellas, con su correspondiente significado:
- El Loco: el fin de algo en tu vida anterior y el comienzo de nuevos cambios.
- El Mago: cuentas con todo lo necesario para llevar a cabo lo que te propongas.
- La Sacerdotisa: debes anteponer el instinto sobre la razón, por lo que puede simbolizar hechos ocultos que serán importantes para ti.
- La Emperatriz: te trae buenas noticias si estás buscando armonía en tu matrimonio o formar una familia.
- El Emperador: liderazgo, autoridad, autodisciplina y estabilidad.
- El Papa o Sumo Sacerdote: representa la doctrina, tu perspectiva de las convenciones morales, religiosas y sociales.
- Los Amantes o “Los Enamorados”: se avecinan decisiones difíciles e importantes en tu vida, pero la que tomes en detrimento de otra traerá un resultado positivo.
- El Carro: te espera un trabajo duro que inspirará ganas de triunfar y de resistencia.
- La Fuerza: como indica su nombre, te enfrentarás a tus problemas con valentía y perseverancia.
- El Ermitaño: necesitas un período de introspección para examinar las situaciones y decisiones.
- La Rueda de la Fortuna: simboliza los ciclos de la vida y habla de nuevos inicios.
- La Justicia: indica una resolución positiva, una advertencia para que cambies tu forma de ser, o incluso para que busques equilibrio en tu vida.
- El Colgado: período de transición o de sacrificio.
- La Muerte: además del fin de una relación, trabajo o de una vida, también sugiere una completa separación entre el pasado y el futuro muy dolorosa.
- La Templanza: encuentra un equilibrio en tu vida y aborda los problemas con calma.
- El Diablo: avisa de una situación de la cual no hay escapatoria o un camino que conduce a ella.
- La Torre: encarna la complicación y el conflicto por acontecimientos imprevistos y traumáticos.
- La Estrella: período de descanso y de renovación tanto físico como espiritual.
- La Luna: ve con cuidado porque algo en tu vida no es lo que parece.
- El Sol: sugiere desarrollo positivo, y que tus metas personales están al alcance de la mano.
- El Juicio: habla sobre una transición que proviene de la razón, la toma de una decisión importante.
- El Mundo: indica crecimiento en la madurez, equilibrio interno y entendimiento más profundo.
Los Arcanos Menores son los antepasados de las cartas contemporáneas, que se dividen en cuatro palos: los bastos corresponden a los tréboles, las copas a los corazones, las espadas a las picas, y las monedas de oro a los diamantes. A su vez, cada uno va desde el as hasta el diez, y cuenta con las figuras del paje, caballero, rey y reina.
El palo de copas, asociado con Piscis, Cáncer y Escorpio, se corresponde con las emociones y con el elemento astrológico del agua; el de espadas, asociado con Géminis, Libra y Acuario, se corresponde con la actividad intelectual y con el elemento astrológico del aire; el de bastos, asociado con Leo, Aries y Sagitario, se corresponde con la carrera y con el elemento astrológico fuego; y el de oros, asociado con Tauro, Capricornio y Virgo, se corresponde con las parejas, aspectos materiales y con el elemento astrológico tierra.
Ponerse en manos de las mejores tarotistas es sinónimo de éxito en la lectura de las cartas
Pero, ¿cómo se utilizan las cartas en el tarot? La tarotista, tras escuchar tu pregunta, baraja todas las cartas y las coloca en un orden específico boca abajo. Existen muchas formas de colocarlas, siempre que representen el pasado, presente y futuro. Finalmente las irá girando una a una a medida que comparte contigo lo que le transmite cada carta.
Si bien es cierto que cada vez más personas se aventuran a hacer tarot sin experiencia, es preferible ponerse en manos de una vidente o tarotista profesional. No lo dudes más y contacta con una de nuestras expertas del tarot.
Taxonomia del Tarot
En la actualidad existen multitud de variantes, en cuanto a las formas y las figuras, de tipos de barajas de Tarot. Se piensa que todos proceden de un tronco único, cuyo origen puede ser Italia. Con el tiempo, en especial las figuras, tienden a adaptarse a la idiosincrasia del país, del lugar o incluso del grupo de ocultistas que las utilicen. Si bien, existen distintos modelos, todas las cartas del Tarot coinciden en la trascendencia semántica e interpretativa de cada tirada y de cada carta.
En cuanto a los componentes del mazo de Tarot moderno, se podría decir que son 78 cartas el número que configura cada mazo. A su vez, existen dos secciones: arcanos mayores y arcanos menores.
Por otra parte, los 56 arcanos menores, o números, aparecen divididos en cuatro grupos o palos de 14 cartas cada uno. Dichas cartas aparecerán numeradas del uno al diez, existiendo cuatro elementos que hacen de figuras. Los 22 arcanos mayores, o triunfos, están numerados del cero al veintiuno, aunque existen versiones en las que el 0, que equivale al personaje de “el loco”, lo excluyen como elemento de adivinación.
Con el devenir de los años y el desarrollo de la simbología, algunos estudiosos del tema han añadido una mayor profundidad y trascendencia al tema del Tarot. Carl Jung, vinculó toda la semántica de los triunfos con distintos arquetipos, concluyendo que el Tarot puede jugar un papel importante en el psicoanálisis y el desarrollo de un nuevo método para entender a la mente humana. Según el propio Jung, los arquetipos, en cada carta, narran una historia y por lo tanto aportan pistas al lector de este tipo de cartas sobre las influencias y determinadas vinculaciones profundas con respecto a quien se está adivinando su pasado o su futuro.
Los símbolos arquetípicos y el Tarot
Si bien es cierto que en críticas posteriores, estudiosos del tema y los propios ocultistas, demostraron que los símbolos arquetípicos, por sí mismos no explican el funcionamiento del Tarot. Es precisamente el poder del lector, partiendo de la base del conocimiento y la interpretación vínculada de esa carta con respecto a sus vecinas, lo que determina lo esencial de éste controvertido método.
Es el poder de quien interpreta, por lo tanto, quien relaciona el patrón de cada símbolo ubicado en una disposición concreta y única, lo que permite arrojar luz y certeza a lo interpretado.
Sea como fuere, cada arquetipo varía en función de múltiples funciones, más allá del contexto, un arquetipo debe estudiarse e interpretarse en un conjunto de condiciones: situación de quien pide consulta, ubicación de cada carta con respecto a sus vecinas y al resto de la tirada, incluso la posición de la propia figura, siendo distinto el significado en cada uno de los casos.
Se puede observar, por último, lo particular de cada lance, como determinadas cartas, por esencia buenas o malas, según su ubicación y su forma pueden cambiar radicalmente de significación e interpretación, así una figura tan negativa como puede ser interpretada, por definición, como un cambio, como una variación de una vida o una existencia que hasta el momento ha podido ser desgraciada o negativa. Al final, como ya se ha esbozado anteriormente, dependerá en gran medida del contexto de la tirada.
Algunos han querido ver el Tarot, como a todo el conjunto de las mancias adivinatorias, como un método maldito y próximo al mal. Nada más lejos de la realidad, para muchos este tipo de actividades es un proceso de conocimiento y perfección filosófico. Saber interpretar, al través de las cartas, es cuestión de trabajo, tesón y estudio. Es cierto, quizá hace falta un don, una sensibilidad para poder hacer uso de una herramienta tan antigua y fascinante como el Tarot, pero no por ello deja de ser un método “limpio” que muy poco o nada tiene que ver con cuestiones diabólicas o malditas como algunos nos han querido hacer creer.
¿Estás ya preparado para consultar el tarot con una buena vidente?
Comentarios
Contenido